by Josefina Richards | Jun 10, 2020 | blog, Uncategorized
Formar una familia es lo que expresan muchos de los que se acercan a consultar por Naprotecnología. Naprotecnología es un tratamiento para parejas que sufren de infertildiad, pero no promete un hijo. No aseguramos que el tratamiento resulte en un hijo ¿Quién puede prometer eso?; ¿Quién puede garantizar un hijo? ⠀⠀⠀⠀
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Pero Naprotecnología si se compromete a:
- 👉Educar a la pareja respecto de su propia fertilidad: Brindamos un servicio para reconocer cual es su tiempo de mayor fertilidad. La particular de cada pareja, en donde se considera el ciclo de la mujer, y la calidad de los espermatozoides del varón. Enseña a reconocer que elementos forman parte de un ciclo sano, y cuales necesitan atención médica.
- 👉 Buscar un diagnóstico. El embarazo es consecuencia de un varón y una mujer sana… por el contrario, no lograr concebir naturalmente indica una falta de salud. Naprotecnología trabaja para encontrar aquello que impide que el embarazo ocurra naturalmente, y busca lo restaurarlo.
- 👉A que todo estudio y tratamiento sea con el fin de buscar la salud e integridad de la pareja, y nunca en contra de ella. Ningún estudio se pide si no contempla el bien integral de la persona.
- 👉Trabajar en favor del vínculo. El vínculo de la pareja es lo que primero debe resguardarse y proteger. La educación, los tratamiento, todo busca mejorar el vínculo, y enriquecerlo, dado que el origen de la vida humana, es el vínculo que se da en la pareja. El vínculo es el primer hogar del hijo. Si el tratamiento para la infertilidad trata al cuerpo como una “cosa”, y no una persona, termina desvinculando y dividiendo, primero al paciente, y eventualmente, distanciando a la pareja. Si el tratamiento aleja a la pareja uno de otro, ¿A dónde va a nacer ese hijo? Ningún tratamiento es más que ese vínculo, fuente de vida y principio del hogar.
Para encontrar tu instructora más cercana, haga click aquí. Más información sobre el Instituto Pablo VI, puede encontrarla haciendo click aquí.
by Josefina Richards | Jul 4, 2019 | Uncategorized
Registrar los ciclos, muchas veces, parece eterno.
Los días de menstruación parecen durar un siglo para las mujeres que tenían algo planeado (viaje, festejo, proyecto). Justo ahí aparece el sangrado, que parecen no irse más.⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
Los que buscan el embarazo, sienten eterna su fase infértil. Miran para atrás con melancolía su único momento de fertilidad, viviendo la fase infértil solo como “lo que está en el medio hasta que vuelva la fertilidad”. Los que evitan el embarazo, les parece que no termina nunca su fertilidad, todos los días preguntándose cuando terminará.⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
No siempre nuestro ciclo responde a lo que queremos, o lo que tenemos ganas. Hay frustración. No podemos olvidar cuales son las intenciones más profundas. Somos conscientes de esa distancia entre lo que sucede en el cuerpo, y la idea que tenía en mi mente.⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
Pero al registrar, uno elige que no termine ahí.
Al final del día, con enojo o con frustración, con desconcierto o incluso dolor, cuando registremos ese día, es importante ser conscientes y recordar, porque se registra, y que significa registrarlo. Registrar significa reconocer. Reconocer es valorar por sobre toda situación o circunstancia. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
Valorar, incluso si no es lo que más me gustaría en este momento. Agradecer mi salud (la que tenga) es un agradecimiento al cuerpo, por todo lo que nos da, porque está ahí.
Significa que más allá de la frustración, desconcierto o el dolor, sobreviene el agradecimiento. Registro porque es mi forma de agradecer (aún con otros sentimientos que generan ambigüedad). ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
Un día los ciclos no van a estar más, y que lindo sería poder volver para atrás, y saber que los supimos valorar como lo que fueron. Y otro día, el cuerpo tampoco va a estar… ¿estamos valorando la capacidad de vida que nos da? El cuerpo que tenemos es en donde se vive la vida que vivimos. ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
Reconocer los ciclos, es apreciar la vida.
Para aprender a reconocer los ciclos con una instructora del Modelo Creighton, busca la más cercana, o quien tenga disponibilidad online, haciendo click aqui. Puede conocer más sobre el Modelo Creighton en la página del Instituto San Pablo VI, haciendo click aquí.
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